jueves, 27 de abril de 2017

Nuestra historia

Ayer volví a contar nuestra historia. Después de cinco otoños viendo caer las hojas, después de cinco inviernos calentándome con los recuerdos, después de cinco primaveras estornudando al oír tu nombre y después de cinco veranos que han pasado, lo recuerdo todo con total claridad. 
Tú, con tu pelo alborotado jugueteando con las puntas del mío, sonriéndome como nunca antes lo había hecho nadie. Y yo, con un nudo en el estómago producto de los nervios y mi inexperiencia, te sonreí con timidez. Me susurraste al oído si quería dar un paseo y mi corazón dejó de latir unos instantes, creo que hasta me quedé sin respiración. Solo pude asentir. Tomaste mi mano y, acariciando mis nudillos con infinita dulzura, nos fuimos cogidos de la mano a algún lugar donde pudiéramos ser solo tú, yo y la luna reflejándose en el mar. Me miraste a los ojos y con una delicadeza de la que jamás te creí capaz, posaste tus labios sobre los míos. Eran cálidos y suaves. Recuerdo que cerré los ojos y me perdí en el momento. 
Y ayer, casi seis (¿o eran cinco?) años después de ese primer beso, volví a contar lo que fuimos, volví a contar nuestra historia. Tan solo éramos un par de chiquillos con ganas de querer y vivir el verano de nuestras vidas, y, aún sigo sin saber si para ti lo fue, pero, sin duda alguna, fue el verano de mi vida.

3 comentarios:

Madrilenials dijo...

En el pasado todo es seguro. Es normal que te encante recordar aquél tiempo :)
Mejor los presentes, los ahoras. En mi caso, miro hacia atrás y veo continuas pérdidas de tiempo recordando el pasado. Nada, nada. Ciao. Arrivederci. Me quedo con el presente.

Te mando un abrazo, y una buena historia por venir!
P.

Claudia S. dijo...

Qué bonito esas primeras experiencias, recuerdos que nunca se van.
Besos!

Lau dijo...

El primer amor es tan bonito y se recuerda tan bien :)
Un beso!